El Real Monasterio de Santa María de Poblet, más conocido como monasterio de Poblet, es uno de los monasterios más grandes de Europa, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1991. Es el único complejo monástico a día de hoy en lograr esta distinción en Cataluña.
Este patrimonio histórico está situado en la provincia de Tarragona y es considerado una gran obra de arte de estilo románico-gótico. Forma parte, junto con los de Santes Creus y Vallbona de les Monges, del conjunto de monasterios cistercienses que se establecieron en la Catalunya Nueva en la segunda mitad del siglo XII.
Es un orgullo para LUXES, haber sido elegidos para llevar a cabo el proyecto de mejora de la iluminación en la nave central de este emblemático sitio histórico, donde el objetivo principal era respetar el gran valor artístico y religioso de esta obra arquitectónica, realzando sus características y a su vez reduciendo el consumo energético del edificio.
En este proyecto, se ha tenido especial cuidado en aprovechar al máximo la luz natural proveniente de las ventanas de la nave central y sus laterales, los rosetones del crucero y de las capillas, como del gran vitral, para lograr una iluminación acorde al entorno.
Los productos seleccionados para este proyecto han sido la serie TUBE TRACK y SCORPION con sistemas de control DMX para controlar tanto la intensidad como el color de las luces en la basílica, para conseguir la iluminación y el ambiente idóneos en cada zona del edificio.
Las luminarias TUBE TRACK, por su gran versatilidad, han permitido destacar zonas tan singulares como el Panteón Real y el conjunto de tumbas de diferentes condes y reyes de la Corona aragonesa, como Jaime I el Conquistador, Martín I el Humano, Pedro III el Ceremonioso, Alfonso V el Magnánimo, entre otros.
Por otra parte, los módulos SCORPION han sido la opción perfecta para instalar en las espectaculares lámparas de cristal turquesa hechas a mano que recorren la nave principal y llevan hasta el maravilloso retablo de alabastro. Estos módulos instalados como una tira continua, han quedado perfectamente integrados a las grandes lámparas artesanales, sin afectar a su estética pero aportando la iluminación idónea al entorno. Esta nueva instalación ha supuesto una mejora considerable en la funcionalidad de la iluminación de la basílica, especialmente la de lectura de los monjes y los filones, evitando el cansancio visual y la creación de sombras. Tan importante como la funcionalidad ha sido elevar la experiencia sensorial del visitante y de las celebraciones que tienen lugar en el monasterio, gracias a los eficientes sistemas de control y las luminarias LED de última generación utilizadas